jueves, 31 de diciembre de 2009

Actuar

Deja tu mente en blanco por un instante...
Transpórtate a otro lugar, a otra época, a otra PERSONA

¿Qué hace, qué piensa, qué siente, quién es?

Ahora, tú mismo, eres otro ser.
Otra personalidad, otros recuerdos, otra manera de enfrentarte a las cosas, una manera diferente de moverte, de pensar.

¿Cómo caminaría, cómo hablaría, cómo se enfrentaría a los problemas?

Todas estas preguntas tienen un denominador común.


Y es que los actores tenemos el maravilloso privilegio de ser quien nosotros queramos, aparte, claramente, de nosotros mismos.



Ahora ya no eres tú. Ahora eres quien tú deseas. He ahí el gran tesoro.




S.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Amistad

Paseando por un bonito paisaje típicamente cantábrico, dejando que mis pensamientos fluyeran, permitiendo que todos y cada uno tuvieran un hueco en mi cabeza al menos durante unos segundos, me di cuenta de que uno de ellos estaba acaparando toda mi atención, sin dejar expresarse a los demás. Era una preocupación, una meditación, una reflexión, por así decirlo.

A veces, cuando algo que ha pasado te preocupa, decides no pensar en ello solamente porque sabes que no es bueno, que vas a llegar a conclusiones aplastantes que es mejor no desenterrar de tu cabeza, porque podrían desatar consecuencias para tí y los de tu alrededor que no te gustarían.

Han pasado demasiadas cosas en mi vida estos últimos meses, cosas que en su día aparté de mi flujo de pensamientos y que ahora vuelven tomando más fuerza, deseando ser oídas.
hands.jpg hands image by elfinka_veterok
Duele ver que confías más en personas que apenas acabas de conocer, que te demuestran más su lealtad que otras con las que te tratas desde hace años, en las que hasta ahora depositabas toda tu confianza. Y desde luego, siempre hay amigos que permanecen a tu lado desde siempre, pase lo que pase, y que están siempre a la altura de las circunstancias.

La verdad duele. Pero alivia.




S.

viernes, 4 de diciembre de 2009

Marea

No notas que a veces tu estado de ánimo es como una ola, a veces tan eufórico que llegas a sentirlo en los dedos de los pies como un cosquilleo, y otras tan distante, tan frío, que ni siquiera lo ves aparecer por el horizonte?

Unos días, gracias a buenos acontecimientos, un regalo que te hacía ilusión, estar con esa persona especial, tomar un café con tus mejores amigos, la marea de ánimo está alta, tanto que podría llevarse por delante a cualquiera.

Otros, por desgracia, tan débil por culpa de problemas y más problemas, personas y más personas...

Será posible que también el ánimo, como la marea, sea capaz de cambiar gracias a la luna?



S.